no creo en la amistad
creo en el amor cuando este evoluciona
y las almas confluyen en un solo ser
no creo en la política
creo en la guerra de los oprimidos
no creo en el presidente
creo que el presidente es elegido a dedo
para mantener al pueblo contento
no creo en las promesas
creo que el presidente es un mero anzuelo
no creo en sus discursos de marketing
creo en las corporaciones mafiosas
que manejan nuestras vidas
no creo en los violines
creo en la música que irradian
no creo que la gente entienda el problema
creo que la gente se contenta con imágenes
no creo en la verdad dicha sobre un pedestal
creo que la vida no es un sueño
no creo que la vida merezca ser vivida
creo en la muerte como el final de un libro
y su consiguiente pagina en blanco
no creo que la gente le de el suficiente valor a las palabras
creo en las palabras
no creo en las buenas intenciones
creo en los hechos
no creo en el descuido sino en el descuidado
creo que la gente se equivoca demasiado
no creo en las videntes
creo en las visiones construidas por el subconsciente
no creo en la familia
creo en mis padres y hermanos
no creo en el lazo sanguíneo
creo en mi hijo
no creo en la gente que no mantiene la mirada
creo en mí
no creeré nunca más en ti
creo en mi gata
creo en mis manos
creo en mis ojos que ven y saben discernir
creo en mi espíritu cuando separa las aguas
creo en mi corazón y en su bondad
creo en los lagos confitados de mi ternura
creo en las aguas destiladas de mi razón
creo en Artaud
creo en Bukowski
creo en Dos Passos
creo en Dostoievsky
creo en el cigarro en mi mano y en su plegaria
de humo que sube y se disipa
creo en las plantas y en las flores
creo en las paredes que se ciernen
creo que mi muerte esta muy cerca
no creo en la propia salvación
creo en los pecados cometidos
creo en la suerte que nunca tuve
creo que nunca la merecí
creo que la culpa es nuestra
creo que la culpa es mía
creo en el suicidio
creo que debería parar.